Anselmo Martínez Treceño, nos trae una nueva entrega del 'Rincón de los Refranes', la actualidad vista como siempre bajo su óptica irónica y amenizada con dichos y refranes populares. En este caso, tratará temas tan polémicos como la gobernabilidad de España y las nuevas reformas educativas.

Perdonadme pero tengo que empezar el Rincón agradeciendo a mi Presidente que se haya dignado a vacunarme sin haberme preguntado antes a quién he votado.
Yendo a tenor del título, la última novela de España podríamos comenzarla con la búsqueda de sinónimos para conceptos que de momento no los tienen, como son la creación de, “Nación de Naciones”, “Federación Asimétrica”, “Estado Plurinacional” y ya para seguir, como cada vez es más difícil “mear fuera del tiesto”, la última inventada del “Estado Multinivel”.
Todo este galimatías de acrobacia lingüística, que solo sirve para no llamar a las cosas por su nombre, no tendría mucha importancia si la factura la pagasen los inventores, pero el problema es que se está tirando con dinero de los ciudadanos. Y lo más triste es que todo este invento de falsas sinonimias no sirve para contentar a nadie.
Esto me recuerda a cuando uno de nuestros presidentes activó la “Alianza de civilizaciones”, propuesta con anterioridad por un presidente Iraní. Teorías muy bonitas sobre el papel, que son muy útiles para ocupar páginas de periódicos y protagonismo de sus mentores, pero que como ensayos que son, no suelen llegar nunca a buen puerto.
Sobre esto último, que les vayan a los Talibán con la monserga de la alianza de civilizaciones.
Sobre la mesa de negociaciones entre el Estado y una de sus Autonomías, además de seguir siendo un derroche innecesario de dinero público, sólo servirá para envenenar a las demás. El País Vasco, para hacer boca, ya está reclamando derechos de siglos pasados…
Cada gobierno que ha necesitado el apoyo de los nacionalistas les ha traspasado nuevas competencias. Les ha dado dinero y este último, incluso les ha indultado uno de los delitos más graves en política como es el de la secesión. Pero el resultado sigue siendo el mismo, nada de nada. Aquí queda claro el dicho: “Si quieres ver a tu hijo llorando de continuo, dale siempre lo que te pida para que no llore” y esperemos que no se cumpla que “Agravio consentido, otro sufrido”.
¿Cuándo nos vamos a enterar de que los problemas territoriales no se solucionan con dádivas? Antaño, cuando alguien se enfadaba se le decía: tienes dos trabajos, “Enfadarte y desenfadarte”. Si algún día imaginario naciese una nueva nación, a renglón seguido empezaría un diluvio de intenciones para futuras Taifas.
Lo que espero que debieran tener claro nuestros gobernantes, es que la solución nunca será desarmar una de las naciones más viejas de Europa.
Y para terminar solo quiero dar la enhorabuena a los responsables de educación por su nueva gran idea. Parece ser que igual que Aznar acabó con el Servicio Militar, ellos van a acabar con el fracaso escolar en la ESO. Todos los alumnos pasarán al Bachillerato, al margen del esfuerzo realizado. A este respecto solo citar que “A base de pereza nadie se endereza” y “No hay peor esfuerzo que el no realizado”